Así lo dispuso la justicia provincial en el último fallo que obtuvimos antes de entrar en el receso de invierno.
Benicio posee certificado de discapacidad y presenta dificultades en su desarrollo madurativo, deterioro del comportamiento, trastorno específico del habla y del lenguaje, entre otras condiciones y por lo que requiere de un tratamiento continuo e interdisciplinario, que comprenda los apoyos terapéuticos de los profesionales que venían trabajando con el niño y el acompañante terapéutico (imprescindible en este caso), prestaciones de las que no se obtuvieron respuestas favorables, deviniendo imposible a sus padres poder costearlas.
Este fallo me da una alegría inmensa, tanto por Benicio como por sus familiares, su mamá Carolina con la que ya habíamos accionado cuando Benicio era más chiquito para la cobertura de su centro educativo terapéutico y que ahora por razones de trabajo tuvo que trasladarse al sur de la provincia, más aún en un momento en donde los profesionales que trabajan en discapacidad se encuentran diezmados por un sistema burocrático que no acompaña las necesidades del hoy y del ahora, en donde los tratamientos que se pierden después no se recuperan.
Dr. Juan Manuel Posse
Abogado dedicado a los derechos de las personas con discapacidad
Provincia de Tucuman.
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