Se trata de la primera iniciativa inclusiva en Latinoamérica. La plataforma hace que las empresas con programas de inclusión laboral y candidatos de sectores postergados puedan encontrarse.
Entendiendo el gran desafío al que se enfrentan aquellas personas que cuentan con algún tipo de discapacidad a la hora de buscar trabajo, los argentinos Natalia Ca y Gabriel Marcolongo decidieron poner en marcha el primer portal de empleo inclusivo de América Latina: incluyeme.com. Hoy trabajan con más de 350 empresas y ya tienen difundidas más de diez mil oportunidades laborales.
Marcalongo visitó la ciudad hace algunos días en el marco de la Semana Social, y compartió con los asistentes las razones que los motivaron a llevar adelante una iniciativa que busca que “las empresas con programas de inclusión laboral y candidatos de sectores postergados puedan encontrarse“.
“Quisiera que levanten las manos todas aquellas personas que hoy tengan un trabajo”, empezó el profesional en su disertación. Luego de que varios asistentes respondieran la consigna, Marcalongo señaló: “Les aseguro que si hiciese esta misma pregunta y el auditorio fueran personas con discapacidad, solamente unos pocos de ustedes estarían levantando la mano”.
En este sentido, representó este desafío con la imagen de un muro, “el mismo muro con el cual se enfrentan todas las personas con discapacidad cuando quieren buscar un empleo”, aseguró.
Gabriel Marcolongo, co funder del portal Incluyeme, en su visita a la ciudad.
“Hoy en Argentina el 10% de la población es discapacitada. Según el último censo, el porcentaje corresponde a casi 4 millones de personas, de las cuales el 73% se encuentra desempleada. Sin duda, entonces, 3 de cada 4 personas con discapacidad hoy no están pudiendo conseguir trabajo“, señaló.
“Y si miramos el resto del continente, en América Latina, tenemos más de 30 millones de personas que se encuentran desempleadas. Diez veces más que en países del primer mundo. Algo estamos haciendo mal”, indicó.
En este sentido, el profesional lanzó un interrogante: “Eso que hacemos mal, ¿se llama discriminación?“. Según él, se trata de “ignorancia”, idea que reforzó compartiendo imágenes donde, por ejemplo, las rampas ubicadas en las esquinas de la calles se encontraban obstruidas por automóviles, postes de luz y carteles.
Hacer simple el proceso de contratación
Haciendo un recorrido por los inicios de la empresa en 2013, Marcalongo contó que, junto a su socia, realizaron más de 400 entrevistas con personas discapacitadas antes de iniciar el proyecto. “Soy ingeniero, y de las primeras entrevistas casi me iba llorando. Conocer las cosas que tiene que padecer una persona para conseguir algo tan simple como un trabajo, me partía el alma”, confesó.
Además de esa instancia de “aprendizaje”, los emprendedores acordaron reuniones con diferentes empresas del país. “Vimos que había algunas que tenían programas de diversidad y de inclusión y, si embargo, no podían llegar al talento de las personas con discapacidad”.
“Por lo tanto, nuestra premisa era clara: hacer simple la contratación de personas con discapacidad, creando un portal de empleo exclusivamente destinado a ello“, señaló.
En cuanto al financiamiento del proyecto, Marcalongo fue claro al insistir que se trata de una “empresa con un fin social”. “Estamos convencidos que no buscamos donaciones porque hoy se sabe que esa plata puede estar, pero mañana no y pasado va a ser más difícil. No queríamos que nuestra misión dependa de cuán bueno seamos para pedir plata, pero queríamos decir que hay gente muy talentosa que está fuera del mercado laboral que lo único que necesita es una oportunidad”, aclaró.
“Vamos a abastecernos con servicios competitivos de las empresas. Si la empresa paga por un portal de empleo tradicional por qué no por un talento que está mucho más comprometido. No hacemos caridad, sólo ayudamos a las empresas a cubrir sus puestos laborales y por otro lado, captamos talentos”, aclaró.
“Cuando comenzamos nos decían que lo nuestro era un nicho muy chico, que sólo 5 empresas iban a poder contratarnos a nosotros y las mejores palabras que tuvimos fue que nos daban seis meses de vida máximo haciendo esta locura. Hoy trabajamos con más de 350 empresas, muchas de ellas cotizan en la Bolsa de Estados Unidos. Pudimos llevar esta locura que hacemos a Chile, a Perú y a México y hoy estamos pensando en lanzar operaciones en Colombia. En cada uno de estos mercados somos la mayor base de datos de personas con discapacidad que están buscando empleo”, contó.
El ingeniero finalizó su presentación en la ciudad con una frase del Papa Francisco. “Hagan lío, si ven algo que les duele, que no les gusta, siéntanse con la potestad de cambiarlo, de hacer lío e intentar que esta realidad que nos toca vivir sea un poquito mejor”.
¿Cuántos Pablos hay en Argentina?
Pablo es una persona que tiene una discapacidad motriz que lo obliga a utilizar unos bastones para trasladarse. Pese a las dificultades, pudo terminar una carrera universitaria y recibirse como analista en sistemas. Sin embargo, al egresar, y a diferencia de sus compañeros, Pablo no pudo conseguir trabajo. Gracias a Inclúyeme, consiguió un trabajo como analista de software en Accenture y logró convertirse en un importante sustento en su casa. Conocé su historia y la de muchos más en este video.
Fuente: http://www.lacapitalmdp.com
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